Empezar un proyecto musical nuevo, especialmente, el primero, y conseguir llevarlo al punto en que tenga su oportunidad en el mundo exterior, fuera de nuestra cabeza, de nuestro local o nuestra habitación.

Algo que, en principio, se podría reducir a un esquema sencillo como crear algo y mostrarlo, en la práctica, se suele encontrar con muchos obstáculos, problemas y confusiones variadas que hacen que no pocos proyectos se estanquen, se agoten o se pierdan antes incluso de tener una forma reconocible y un lugar para ser descubiertos.
Vamos a hablar un poco de esta situación y de cómo la podemos afrontar.
¿Empezar desde dónde?
Bien, lo primero que hay que decir en este asunto es que hay mil casos, mil situaciones distintas que se pueden dar en el momento de iniciar un proyecto musical.
A veces se trata de un artista, compositor o grupo novel, otras de personas que ya han intentado o conseguido llevar adelante un proyecto de este tipo con anterioridad y, también, en ocasiones, profesionales que toman un nuevo camino en su carrera o quieren crear un proyecto secundario para dar salida a sus inquietudes o creatividad.
El origen de un proyecto musical puede ser casi cualquier cosa, algo accidental en el día a día de una compositora o de un músico o cantante, un desengaño personal o profesional, un hallazgo concreto, una idea conceptual pura, cualquier cosa, realmente.
Cualquier evento que muestre un camino distinto a lo que estás haciendo hasta el momento, suficientemente interesante y sustancial como para considerarlo candidato a ser la semilla, por así decirlo, el principio de una nueva aventura artística y musical.
Entonces, debido a que el panorama es muy dispar, en este programa he intentado integrar las variadas casuísticas particulares y reducir las muchas posibilidades de acción a unos pocos puntos importantes y comunes que deberían darse para que el proyecto llegue a un punto donde pueda ser viable, al menos, en el mundo moderno.
La idea detrás de todo esto sería que, cualquiera que sienta una necesidad creativa musical, pueda orientarse con una serie de pasos muy concretos para que ese proyecto exista efectivamente, su público potencial pueda escucharlo y el conjunto de la propuesta tenga un aspecto convincente.
Por lo tanto, lo que vais a escuchar no es un plan personalizado para nadie en particular pero sí una especie de guía rápida para que las cosas vayan sucediendo en un orden y dirección concretas, evitando las típicas dudas, idas y venidas, retrasos, olvidos y demás que suelen darse muy muy a menudo en el ámbito de los procesos creativos, sobre todo, cuando queremos que tengan una presencia digna en el mundo real.
Tómatelo como las etapas o fases mínimas que hay que ir completando para que tu música tenga la oportunidad de ser escuchada por un número razonable de personas afines.

Lista de acciones
Entonces, recomiendo estos pasos para minimizar las dudas, el tiempo y energías perdidas en ir adelante y atrás, casi como un checklist o una lista de tareas que deben realizarse en este orden y que no pueden seguir adelante sin haber completado las previas.
Ahí vamos.
Escucha y apunta, si crees que te será útil, los siguientes 10 puntos.
- Definir el proyecto: Escribir unas líneas con los elementos musicales o ideas principales de lo que quieres hacer. Esto puede incluir estilo musical o descripción de referencias artísticas concretas, el tono o temáticas principales de las letras, actitud global de las composiciones, … Todo este tipo de detalles, una vez escritos, funcionarán como una brújula, como una ayuda en la bruma del proceso creativo y las otras historias más mundanas. No hace falta que sea un documento extenso o superdetallado, ni te lo debes tomar como un condicionante o una limitación, pero sí debe dejar claros los fundamentos y el propósito básico del proyecto en conjunto.
- Componer y grabar algo: Si este nuevo proyecto ha surgido de una canción, esa canción es la que tienes que utilizar como base para completar el primer paso del proyecto, y si no tienes ninguna terminada todavía, es el momento de hacerlo. Compón al menos dos temas y grábalos como puedas, con tus medios, pidiendo ayuda a amigos o invirtiendo algo de dinero, si lo tienes, en un productor o músicos que te puedas permitir. Si no tienes presupuesto hazlo casero, sencillo, auténtico, hazlo sin miedo, sin vergüenza, con pocos elementos musicales será suficiente. Compón y graba dos temas como mínimo, y cuatro, máximo. Y pasa a la siguiente fase. Esto no tiene que ser eterno. Márcate un límite, un mes máximo, por ejemplo, y cúmplelo.
- Un nombre: Cuando tengas las canciones debes elegir un nombre para el proyecto. Por diferentes razones, debes nombrarlo. El que quieras, como quieras, pero necesitas un nombre. Puedes pensar en el tipo de palabras o lenguaje que se usa en el rollo que tenga tu propuesta y elegir algo relacionado o tal vez optar por algo completamente distinto. Tan sólo mira por internet y asegúrate que no escoges el mismo nombre que otro proyecto musical ya existente. Un nombre único en su especie, que no tiene porque ser el mejor nombre de la historia, tan sólo un nombre con el que te sientas cómodo y que no esté relacionado ni sea demasiado semejante a otros.
- Dominio y Redes sociales: Una vez tengas el nombre, hazte con un perfil en todas las redes sociales que te interese, es decir, en todas las importantes, aunque no los vayas a usar, protege tu marca desde el principio. También vas a comprar un dominio con el nombre elegido. Un .com sería lo ideal. Si no lo encuentras libre puedes usar tu nombre con la palabra music al final, por ejemplo, Ejecutoresmusic.com o Laspoderosasmusic.com o algo por el estilo. Comprar un dominio .com durante un año cuesta menos de 15 euros. Gastar esta pequeña cantidad va a comprometerte un poco más con lo que estás haciendo, te va a impulsar, incluso te va a hacer ver cosas que todavía no existen todavía, pero que ya están en camino, van a enriquecer y afirmar tu visión de lo que estás empezando a crear. Con esta parte del proceso, estás poniendo las primeras piedras de la visibilidad de tu proyecto en el mundo real, y en el siguiente punto, vas a hacer tu casa, el centro de operaciones.
- Web: Con el dominio vas a poder construir tu web, tu carta de presentación más importante y el centro de tu proyecto en muchos aspectos. Hay gente que prefiere empezar sólo con las redes sociales o youtube e ir viendo. Haz lo que quieras pero ten en cuenta que las redes sociales son las casas de otros, no la tuya. un fan o seguidor o suscriptor en una red social es suscriptor de la plataforma que sea, en primer lugar. Tú no tienes sus mails, no puedes contactar directamente con ellos sin intermediarios, estás a su merced en muchos aspectos. Yo recomiendo que te hagas una web sencilla para tu proyecto. Una vez más, tú veras todo como cada vez más real, como más serio, como más ambicioso y las persona que escuchen tu música, verán lo mismo.
A mi me gusta WordPress. Es gratis, tienes el control absoluto de lo que aparecerá, es sencillo, es código abierto y puedes hacer bastantes cosas interesantes fácilmente. Necesitarás, eso sí, pagar un hosting mensual, con autoinstalador wordpress, casi todos lo tienen. Por menos de 5 euros al mes tienes muchas opciones. Piensa en una web sencilla, para empezar, es una referencia para fans y profesionales, con un formulario para contactar contigo via mail, con tu música para escuchar, foros, videos si los tienes, .. tus cosas, en tu casa, con tu proyecto mostrando su poderío, lo que es y lo que no es.

- La imagen: El siguiente paso es establecer una imagen reconocible, decidir aunque sea de una manera sencilla, un estilo visual, un tipo de ropa, una actitud frente a las cámaras. Algo más o menos natural, sería lo más fácil de sostener, pero puedes inclinarte por una imagen recargada o sofisticada, porqué no. El caso es que tus fans del futuro te van a querer ver, y vas a necesitar fotos y videos, aunque sean piezas audiovisuales sencillas, para alimentar su curiosidad, los contenidos de las redes sociales y tu web, además de eventuales peticiones de medios de comunicación. Hay muchos compositores, músicos y cantantes que sufren con este punto. La exposición pública es algo delicado, sin duda, pero un proyecto musical necesita tener una imagen, la que sea, que complete su propuesta y deje claro qué quieres ser, artísticamente. Si necesitas un disfraz, un sombrero, lo que sea para definir una imagen para ti y para tu música, adelante, hazlo.
- Pacto de socios y registros: El siguiente paso, si no lo has hecho todavía, es registrar tus canciones en el organismo de la propiedad intelectual de tu región y, si es posible, también en una entidad de recaudación de derechos de autor. Te lo recomiendo, es algo tedioso, sin duda, pero por suerte también es cada vez más sencillo y te va a dar una seguridad jurídica sobre tus composiciones y una tranquilidad para no tener que estar pensando en ello a cada rato. Pero antes incluso de esto, si sois un grupo, os pido, por favor que os sentéis una tarde y defináis claramente el funcionamiento básico interno del grupo, quien va a componer, quién va a ser el propietario de las composiciones, cómo se van a solucionar los desacuerdos y todo lo que podáis concretar en este sentido. Habladlo, escibidlo en un papel y repartíos copias firmadas por todos los implicados. A nadie le gusta este trámite, hablar claro, ponerse de acuerdo, pero es algo fundamental que va a evitar mil problemas en el futuro. Es un pacto de socios, un documento privado que tiene un valor incalculable. Hacedlo y si hay productores o más gente por en medio, si corresponde, añadidlos en este documento o cread otros cuando trabajéis con ellos, y seguid adelante. Los contratos son una señal de que las cosas van firmes hacia alguna parte. Hay que acostumbrarse a ellos.
- Planificar los primeros meses. Antes del lanzamiento del proyecto, debes tener algunas cosas preparadas. Si estás solo o sola, intenta buscar ayuda de amigos para hacer ruido y ampliar tu visibilidad. Si puedes formar un pequeño equipo, aunque sea temporalmente, perfecto. Si sois un grupo, igual. Repartid las tareas, especialmente, las redes sociales en una primera fase. Hay que estar allí donde esté vuestro público objetivo, tenéis que saber qué tipo de personas son esas a las que les va a encajar mejor vuestra propuesta musical e ir a buscarlas. Habladles usando su lenguaje, interactuad, mostrad detalles de las composiciones, de vuestra forma de ver la vida y el arte, … Cread relaciones con esas personas, sin esa gente es casi imposible que vuestra música sea escuchada y tenga repercusión más allá de vuestra casa y amigos. También debes tener preparado todo lo necesario para dar actuaciones de todo tipo, en pequeño formato, al menos, y online, por supuesto, todo el material tiene que estar preparado para poder hacer conciertos o apariciones públicas de alguna forma. Un ryder puede ser muy útil en este sentido. Se trata de un documento técnico en el que se detallan las necesidades técnicas de un artista, banda o compañía para realizar adecuadamente su espectáculo.
- Lanzamiento: Con todo esto en orden, abre tu web al público, activa tus redes sociales y todos los contactos de que dispongas y lanza tu primera canción. Si no tienes una base de fans, sencillamente, deja que se escuche tu canción y que ella hable por ti, en primer lugar. Usa youTube, Spotify y demás plataformas gratuitas, por lo menos, y dedica tiempo a promocionarla. Una secuencia sencilla para cada nueva canción podría ser: Anuncio, Lanzamiento, material gráfico relacionado, comentarios sobre la canción, anuncio de videoclip o similar, lanzamiento del video, y más pequeñas piezas de contenido para tener una presencia sostenida durante ese proceso. Y después, vuelta a empezar con un nuevo tema.
- Constancia y Contactos Las semanas y meses siguientes hay que picar piedra, estar presente en las redes sociales, ir anunciando y mostrando canciones, escuchar el feedback de tu primeros oyentes, contactar con medios afines a lo que estas haciendo, entrar en comunidades relacionadas con la música que estas haciendo, .. Hay que mostrar constancia, hay que dar y tienes que hacerte oír en los sitios donde puedas encajar, de alguna manera. Un proyecto musical necesita ir tejiendo una red de seguidores, contactos, profesionales de la industria musical, entrevistas, etc … Incluso un proyecto que no vaya a presentarse en directo nunca, por ejemplo, va a necesitar contactos y redes para desarrollarse.
Conclusiones
En fin, es mejor tener un plan que no tenerlo. Es mejor seguir un camino que andar por el desierto.
Aumentan las posibilidades de llegar a alguna parte.
Y aumentan mucho.
No se trata de seguir a ciegas un sendero, está claro, pero una referencia, una dirección, una visión de conjunto y un cierto orden a la hora de pensar y hacer las cosas suele ser una gran ayuda y dar mejores resultados que otras opciones como la improvisación pura o la impulsividad ocasional.
Se suele decir que hay oídos para todas las músicas y es cierto, pero no es menos cierto que el tiempo para escuchar es limitado, que la oferta es enorme, variadísima, y que no todas las propuestas van a tener la acogida que tal vez se merezcan.
Hay innumerables factores que influyen y determinan qué canciones o qué propuestas musicales llegarán a tener una exposición suficiente y cuáles de ellas tendrán éxito en alguna medida.
Los grupos y artistas que nos gustan, mediante su presencia en los medios de comunicación¡, redes etc … establecen una relación con cada uno de nosotros, aunque no nos conozcan ni sepan que existimos.
Cuando escucho a Rosalía o a Metallica o Coldplay o cualquier otra propuesta musical, se establece algún tipo de relación entre nosotros, una especie de diálogo, medio ficticio, pero que funciona, una ilusión de cercanía, de confianza incluso, que lleva la experiencia puramente musical a otro nivel, a nuestra intimidad, con suerte, a nuestras entrañas y nuestro corazón.
Esa es la relación que necesitamos establecer, con los medios que tengamos a nuestro alcance en cada momento.
Y todavía no hemos hablado de dinero.
Para esta guía inicial, he preferido dejarlo a un lado, ya que lo primero es la música y armar una propuesta clara, coherente y con sentido.
Si añadimos el factor económico, el hecho de que los profesionales de la música necesitan conseguir un sustento económico mínimo para sobrevivir dignamente, el asunto se complica todavía más.
Hay que tener claro que, un proyecto musical debe ser sostenible y viable para sí mismo y para los implicados, así que, a medio plazo, se tendrán que buscar vías de ingresos, para poder seguir dedicando tiempo y recursos al proyecto.
Pero eso puede ser más adelante, no nos adelantemos.
Ante todo, tenemos que ser ordenados, ir completando los pasos y también ser realistas: no es fácil pero tampoco es imposible, te lo doce el Sr Imposible.
En serio.
Sólo quien lo intenta lo consigue, esto es una verdad aplastante que no podemos olvidar.
Te animo a que, si tienes algo que decir, un canto que se escapa de tu garganta, un anhelo de expresarte con la música y las canciones, te pongas en marcha y ya veremos qué va sucediendo.
Ánimo. Escribe canciones y muéstralas.