El Rock and Roll ha sido uno de los grandes movimientos musicales e, incluso, sociales del siglo XX y hasta nuestros días. En sus inicios fue más bien música para adolescentes acomodados pero, con el paso del tiempo, demostró tener un potencial creativo muy importante, hasta inspirar miles de canciones memorables y decenas de estilos distintos.
Veamos de dónde salió el Rock ‘n’ roll y cuáles fueron algunos sus efectos en la cultura musical de todo el mundo.

Historia del Rock and roll. Bienestar y diversión
Una vez superada la Gran Depresión económica, consecuencia del crack de 1929, a partir de la década de 1940, aproximadamente, la sociedad estadounidense entró en una época de prosperidad.
Además, el boom demográfico posterior al fin de la Segunda Guerra Mundial provocó que, de 1956 en adelante, la población adolescente en fuera muy numerosa.
Esa conjunción dio como resultado una clase media abundante y una juventud con dinero para gastar. Gracias a él, pudieron obtener signos de identidad propios, distintos de los de las generaciones anteriores, como la de sus padres y madres, por ejemplo, la cual se había visto obligada a trabajar duro para salir de la crisis económica del país.
El Rock and roll, o Rock ‘n’ roll, o también Rock & roll, como género musical, podríamos decir que consiste en una combinación de elementos procedentes de diversos géneros de música popular estadounidense. Por ejemplo, el Rhythm and blues, el Doo wop, el Hillbilly, el Blues y el Country , entre otros.
Rock & Blues versus Rockabilly
En realidad, bajo el término Rock and roll, fluían dos corrientes paralelas con diferencias y peculiaridades bastante claras.
El Rock and Blues seguía la tradición negroamericana que venía directamente del blues y el Rhythm and blues. En aquella época era considerada y publicitada como música racial, siguiendo las costumbres establecidas de segregación.

Las radios ya llevaban un tiempo introduciendo ese Rock, digamos, afroamericano a la audiencia joven y blanca.
Por otro lado, el Rockabilly era, por así decirlo, el rock de los blancos. Aunque había absorbido también el sonido Blues y otros ritmos afroamericanos, tenía su dosis importante de Country y Hillbilly, la música rural de las montañas Apalaches, que practicaban los descendientes de los ingleses e irlandeses. Era, en realidad, música folclórica muy distinta a la pulsión negra del ritmo y de la vida.
Entre los primeros representantes del género se suele incluir a Chuck Berry, Little Richard o Bo Diddley, entre los intérpretes afroamericanos, y a Bill Haley & His Comets, Jerry Lee Lewis, Buddy Holly, Eddie Cochran y Gene Vincent, por el lado más Rockabilly. En realidad, la separación racial en el género, especialmente, en cuanto al público, se iba difuminando poco a poco, y el estilo puso, de algún modo, su grano de arena en el larga historia del fin de la segregación racial en Estados Unidos.
La música en el Rock and roll
Inicialmente, el Rock and roll no fue, en lo estrictamente musical, mucho más que Rhythm and blues rápido y algo más directo, por así decirlo.
Escribir música para canciones de ese estilo, consistía en seguir utilizando estructuras blues de 8, 12 o 16 compases de 4/4, con el bombo de la batería en el tiempo 1 y 3, y la caja acentuando en 3 y el 4.
Se tocaba de manera más agresiva y, en los solos, se acostumbraba a usar la escala pentatónica menor con una o dos alteraciones, que pasó a ser llamada, más adelante, “escala de blues”.
El combo rock
Una de las características que las bandas de Rock and roll de los primeros años era que incluían batería, bajo, guitarra o guitarras eléctricas, voz y piano, saxofón o metales.
Esto era básicamente el conjunto de Rhythm and blues típico pero, en pocos años, los vientos y el piano, en menor medida, fueron desapareciendo y dejaron paso al clásico combo Rock que ha llegado hasta nuestros días: batería, bajo, guitarra eléctrica y voz.
El éxito masivo
Entre 1955 y 1956 estalla la enorme popularidad de la que disfrutó el Rock and roll. Los éxitos se suceden: Bill Haley & His Comets, Chuck Berry, Jerry Lee Lewis, entre otros y, finalmente, Elvis Presley.

Elvis se convirtió en un ídolo para de los adolescentes rebeldes norteamericanos. Al no ser afroamericano como Berry, y realmente muy joven, a diferencia de Bill Halley, reunía las condiciones perfectas como personaje del Rock and roll.
Podía cantar en un tono meloso y pasar inmediatamente al grito («shout«) de la tradición negra, por lo que resultaba una figura sensual, nueva y, de algún modo, desafiante.
Elvis se convirtió en una celebridad americana, reconocida incluso por figuras del Rock afroamericano como Little Richard. El hecho de que fuera blanco, pero cantara con una actitud negra hizo que se convirtiera en un punto de encuentro aceptable para la industria y los aficionados al Rock and roll de las dos comunidades.
Las letras del Rock and roll
Al ser un fenómeno que, al menos al principio, prendió entre la gente más joven y en una época, digamos, de bonanza económica, las letras fueron un fiel reflejo de todo ello.
Relaciones de pareja, sexo más o menos insinuado, conflictos con la familia, ganas de divertirse y asuntos similares fueron los asuntos más tratados en aquellas primeras letras de canciones escritas para el estilo Rock and roll.
El lenguaje utilizado era bastante directo, aunque incluía juegos de palabras y dobles sentidos como parte del juego narrativo, y fue una característica importante en las letras del género.
La corriente más negra, más Blues, solía tocar temas algo más sociales, referentes sobre todo a la situación más desfavorecida y discriminatoria del colectivo afroamericano. Ese fue un rasgo distintivo frente a las letras de Rock and roll de los grupos blancos, pero sin dejar de estar sumidas en un contexto de entusiasmo, crítica generacional y sensualidad juvenil.

Más allá de la juventud
El caso es que el Rock and roll fue creciendo más y más en popularidad, y se escribieron canciones de ese estilo no sólo en Estados Unidos sino en muchos otros lugares del mundo, especialmente, en Inglaterra con el Beat.
El género hizo madurar la industria musical y ésta encontró un modelo económico y social nuevo en relación con la música popular. La estética y la maquinaria audiovisual se unieron con los artistas y el enfoque musical de masas empezó a consolidarse.
La imagen pública y publicitaria empezó a tener tanta importancia como la música, las letras y los artistas en sí mismos. En adelante, la dicotomía entre lo comercial y lo estrictamente musical se convirtió en un tema recurrente tanto para el público y los músicos como para los medios de comunicación y las discográficas, afectando a las variadas formas que el Rock adoptó en las décadas siguientes.
Aunque lo estético y visual había tenido su importancia en la parte referente al espectáculo musical y las actuaciones en directo, después del Rock and roll alcanzó un protagonismo extraordinario y desconocido hasta entonces.
Nos guste o no, desde los Beatles hasta cualquier grupo, solista o género posterior a esos años nadie ha podido escapar a la cuestión de la imagen y su relación con el sonido o el carácter de la música y las canciones.