No hace mucho tiempo, si querías que un violín sonara en una canción necesitabas nada más y nada menos que un violín y, probablemente, un violinista. Además, si querías hacer una grabación de ese violín necesitabas micrófonos, cintas y demás aparatos de grabación, es decir, un estudio y los técnicos que manejaban esos aparatos. Entonces llegó el Midi y todo empezó a cambiar.

Orígenes del invento
En la década de 1980 las tecnologías digitales estaban desarrollándose cada vez más rápido. Las aplicaciones de esos ceros y unos, así como de las máquinas que procesaban la información digital daban frutos cada vez más completos y asequibles.
Era tan sólo el principio de todo lo que ha venido después pero, en aquellos años, se creó un protocolo digital que, con el paso del tiempo, cambió la música para siempre.
Pero, ¿qué es el Midi, exactamente?
El MIDI responde a las iniciales de Musical Instrument Digital Interface, que significa algo así como Interfaz Digital de Instrumento Musical.
Es un protocolo técnico, una especie de lenguaje que hace posible la comunicación entre ordenadores, instrumentos musicales y otros dispositivos digitales.
Un ejemplo clásico de uso de esta tecnología sería un teclado que genera datos Midi al ser tocado, que mediante una conexión o conexiones específicas transmiten esa información a otro dispositivo, por ejemplo, una computadora, donde esa información es procesada y convertida en sonido.
Es un explicación esquemática y sencilla, pero puede valer como ejemplo ilustrativo.
El teclado, el origen de los datos, puede ser cualquier otro dispositivo capaz de generar esa información Midi, una batería electrónica, un programa de edición de audio, etc … La conexión física puede ser la típica Midi, usb u otras. Y la computadora puede ser, en el momento final de generar sonidos, un sintetizador, un banco de sonidos p cualquier dispositivo capaz de transformar esa información Midi en sonido.
Tiene que quedar claro que el Midi como tal NO es audio, no suena de ninguna manera, sólo son datos. Esa es su limitación y también su fortaleza, ya que los hace fácilmente transmisibles y manipulables en otros entornos.

Controladores Midi
Para usar la tecnología Midi, como hemos visto, vamos a necesitar un emisor de la información, un dispositivo controlador o maestro que dirija el flujo musical, por decirlo así.
Lo más común, tal vez, es que este papel lo desempeñe un teclado de algún tipo, debido a la potencia y sencillez de su sistema de producción de sonido.
Estos teclados controladores reciben este mismo nombre especialmente cuando son solamente eso, un teclado que envía información Midi a otros dispositivos donde el sonido efectivamente se generará según los parámetros enviados. Un teclado Midi como tal no tiene ningún sonido, no suena de ningún modo por sí mismo, sólo genera datos.
Otros teclados que incluyen en su fabricación sonidos pregrabados, o los teclados sintetizadores que tienen bancos de sonidos y pueden además modificarlos mediante controles integrados en ellos, pueden actuar también como controladores Midi de otros dispositivos externos como computadoras u otros bancos de sonidos si disponen de la conectividad necesaria.
Igualmente, otros dispositivos musicales como baterías, pads o secuenciadores y demás pueden ejercer también como controladores si disponen de los componentes y las conexiones necesarias para ello.
Conexiones

Las conexiones originales Midi esra tres:
- Midi Out: La conexión MIDI OUT transmite la información MIDI de un dispositivo maestro a otros dispositivos externos. Si estás en un entorno de Home studio es muy probable que sólo uses el MIDI OUT enviar los datos al DAW de tu ordenador personal.
- Midi In: La conexión MIDI IN recibe la información MIDI del dispositivo anterior, de su MIDI OUT, sea el dispositivo que sea.
- MIdi Thru: La conexión MIDI THRU duplica la información que llega por el puerto MIDI IN y permite conectar varios dispositivos en cadena y conducir las propiedades de esos instrumentos a un DAW o secuenciador determinado.

Los cables
Los cables que unen estas conexiones Midi se caracterizan por tener 5-pin DIN en sus extremos y se conocen popularmente como cables midi. Necesitarás uno por cada salida/entrada puerto Midi que vayas a utilizar.
Actualmente, los cables usb pueden transportar este tipo de información en un solo cable y es muy habitual encontrarlos en cada vez más dispositivos Midi.

Canales Midi
La información Midi se organiza por canales, de modo que un mismo dispositivo controlador puede comunicarse con los otros instrumentos, computadoras o módulos de sonidos por hasta 16, digamos, vías distintas e independientes.
Estos canales deben estar correctamente seleccionados y habilitados en toda la cadena de conexiones para que el sonido se produzca como se espera, además de mantener la sincronización del conjunto estable.
Usos del Midi
El Midi fue una innovación que cambió la música. Amplió las posibilidades de trabajar y experimentar con los sonidos, las formas de componer canciones y grabarlas, música instrumental y audio en general. Hizo accesible para todo el mundo combinaciones sonoras antes reservadas sólo a unos pocos.
Se usa para diseñar nuevos sonidos, texturas inimaginables, para manipular el audio hasta límites insospechados.
Para crear la música de cualquier canción o bandas sonoras sin la intervención de un montón de músicos, para esbozar demos y maquetas en estudios domésticos, para que cualquiera pueda escuchar sus canciones en entornos sonoros variadísimos sin gastarse una fortuna.
Para trabajar a distancia con otros músicos, para acercar lo que está o estuvo separado, para convertir, en definitiva, sueños en realidades.

Conclusiones
Hoy en día, gracias a las librerías de sonido, las computadoras y los DAWs, los muy variados dispositivos de audio e instrumentos virtuales cualquier persona puede con una modesta inversión escribir canciones, componer música, experimentar ideas locas desde su propia casa, con pocas limitaciones más que nuestra imaginación.
Agradezcamos a todos aquellos técnicos e investigadores que crearon esta maravilla su visión y su trabajo. La aportación que hicieron al mundo de la música no ha dejado, desde entonces y hasta la actualidad, de agrandarse.