Yo solfeo, tú solfeas, … «Solfear es muy útil, pero difícil de aprender». «El solfeo es algo antiguo que no es necesario o que ya nadie utiliza» … Y así, decenas de expresiones y opiniones sobre el solfeo, su práctica y su utilidad.

En este artículo vamos a intentar explicar qué es, cómo se aprende y para qué sirve solfear.
Origen del solfeo
Durante cientos de años el sol, el aprendizaje musical reglado se ha basado en las partituras, es decir, ese sistema codificado por el cual unos símbolos y un pentagrama comunican información musical a quien sepa interpretarlos.
La palabra solfeo, como tal, parece que deriva del antiguo término «solfa», combinación de sol y fa, que se utilizaba para designar las partituras que contenían esas dos pentagramas y claves.
El solfeo, entonces, finalmente consiste en el aprendizaje y la práctica de solfear, es decir, leer y entonar las notas musicales de una partitura, pronunciando el nombre de cada una e interpretando tanto el tempo como la métrica musical de la obra o pasaje.
Esta sería una definición sencilla de lo que entendemos por solfeo básico.
Aprender solfeo
Siguiendo esta idea, no cuesta mucho comprender que la música es un idioma, un lenguaje con sus normas, usos y costumbres que la notación musical ordena de alguna manera, y que hace posible y efectiva la escritura y la lectura musical.
Por lo tanto, aprender solfeo significa hasta cierto punto, al menos, aprender un nuevo idioma, el idioma de la música.
Más adelante en este mismo artículo hablaremos de si es necesario o no saber solfeo y las ventajas que puede tener poder leer y escribir música, de conocer mejor el lenguaje musical.
Solfeo silábico
El solfeo silábico es un método de notación musical que utiliza símbolos de notación musical junto con sílabas para representar los diferentes tonos de una melodía.
En este método, cada nota musical se representa con una sílaba específica, como «do» para el tono más bajo en una escala mayor, «re» para el tono siguiente, y así sucesivamente.
Esta forma de aprendizaje del solfeo se utiliza a menudo en la enseñanza de la música y es útil para aprender a leer partituras y comprender cómo se relacionan los tonos en una melodía.
Solfeo melódico
El solfeo melódico es un método ligeramente distinto del silábico que sirve igualmente para representar los diferentes tonos de una melodía.
A diferencia del solfeo silábico, que utiliza sílabas para representar cada nota musical, el solfeo melódico utiliza símbolos de notación como líneas y puntos para representar las notas musicales.
Veamos algunos ejemplos:
- Una línea recta con un punto encima representa una nota de tono más alto que una línea recta sin punto:
Nota de tono más alto:
- Una línea recta con dos puntos encima representa una nota de tono aún más alto que una línea recta con un solo punto:
Nota de tono aún más alto:
- Una línea recta con una pequeña línea diagonal encima representa una nota de tono aún más alto que una línea recta con dos puntos:
Hay muchos otros símbolos y patrones melódicos que se pueden utilizar en la notación musical.

Solfeo rítmico
El solfeo rítmico consiste en recitar los nombres de las notas de la melodía pero sin llegar a cantarlas o entonarlas-
Sí que tenemos que respetar las duraciones de las notas, es decir, sus valores rítmicos, así como la indicación del tiempo y, por lo tanto, ignorando cualquier alteración tonal como sostenidos o bemoles, con el fin de preservar el ritmo, mientras que, habitualmente, se marca con una mano el compás.
Ventajas de saber Solfeo
Practicar y poder recurrir al solfeo en nuestra vida diaria, nos traerá algunos beneficios muy interesantes.
- Mejorará la lectura musical: El solfeo es una herramienta importante para aprender a leer partituras y comprender cómo se relacionan los tonos y el ritmo en una pieza de música.
- Ayudará a la interpretación musical: El solfeo puede ayudar a entender cómo se deben ejecutar las notas y los patrones rítmicos en una pieza de música, lo que puede mejorar la interpretación y la expresividad al tocar o cantar.
- Ampliará las posibilidades musicales: El conocimiento del solfeo puede abrir puertas a nuevas oportunidades musicales, como la posibilidad de tocar o cantar piezas más complejas o de componer música propia. Además, el solfeo puede ser útil al trabajar en conjunto con otros músicos, ya que facilita la comunicación y la colaboración.
¿Es necesario saber solfeo?
Como el español o cualquier otra lengua y sus respectivas gramáticas, la música no te obliga a saber solfeo para poder disfrutarla.
Todo el mundo puede cantar, tararear y silbar melodías sin tener ni la más remota idea de lo que es el solfeo, y todo el mundo debería hacerlo 😉
Si creces en un lugar en el que se habla español vas a poder hablarlo mejor o peor y la música, de la misma forma, va a poder tocarse, cantarse o incluso componerse si has pasado tiempo con ella y has prestado atención a sus peculiaridades, aunque no la hayas estudiado formalmente, como bien saben los autodidactas.
Muchos músicos amateurs tienen poca o nula práctica con las partituras y, sin embargo, en contra muchas veces de su propia opinión, saben bastante de música.

Conclusiones
La notación musical, como también se suele llamar consiste en este entramado de signos musicales y, para decirlo brevemente, tiene esa doble función de cualquier idioma: escribir y leer, o leer y escribir.
En principio, quien sabe leer también sabe escribir y viceversa, aunque nunca se llegue a escribir ni una nota con ambición compositiva.
Pero, en cualquier caso, añadir una habilidad como el solfeo a nuestras herramientas musicales va a proporcionarnos una nueva vía de relacionarnos con ella a varios niveles. Hay que tener esto en cuenta antes de despreciarlo o quitarle importancia.
Resumiendo, el solfeo consiste en reunir ciertas habilidades combinadas como el entrenamiento auditivo, la concentración o constancia en la práctica que, progresivamente, va a cristalizar en un reconocimiento e interpretación musical más precisa.
La lectura vista, además, como a menudo se llama a la interpretación de una partitura sin estudio precio, tiene mucho que ver con la capacidad de solfear con seguridad y soltura.
En fin, el solfeo pide dedicación y, al cabo del tiempo, devuelve una especie de superpoder: escuchar la música escrita sin ayuda de ningún instrumento.
Vale la pena valorarlo y, tal vez, dedicarle el tiempo que pida para acceder a esas facultades maravillosas.
Piensa en ello.